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Electrónica







2006, año de consolidación de la tecnología RFID



la tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID) está adquiriendo preponderancia. Se considera como un método más seguro para identificar no sólo personas, sino programas informáticos, vídeos, CDs de música (por ejemplo China va a ser el primer país en incorporar esta tecnología en la lucha contra la piratería) entre otras muchas posibilidades.

2006 la consolidación

Una tecnología conocida como el transpondedor de IFF, que fue inventada por los Británicos en 1939, y fue utilizada de forma rutinaria por los aliados en la Segunda Guerra Mundial para identificar los aeroplanos como amigos o enemigos, se considera como el precursor de los sistemas RFID.

Otro trabajo temprano que trata el RFID es el artículo de 1948 de Harry Stockman, titulado "Comunicación por medio de la energía reflejada" (Actas del IRE, pp 1196-1204, octubre de 1948). Stockman predijo que "... el trabajo considerable de investigación y de desarrollo tiene que ser realizado antes de que los problemas básicos restantes en la comunicación de la energía reflejada se solucionen, y antes de que el campo de aplicaciones útiles se explore." Hizo falta treinta años de avances en multitud de campos diversos antes de que RFID se convirtiera en una realidad, aunque difundida a pequeña escala.

El marcado de RFID habitual de productos, en sustitución del código de barras, será comercialmente viable con volúmenes muy grandes de 10000 millones de unidades al año, llevando el coste de producción a menos de 0,05$ según un fabricante. La demanda actual de estas etiquetas no está cerca de soportar ese coste. Los analistas de las compañías independientes de investigación como Gartner and Forrester Research convienen en que un nivel de precio de menos de 0,10$ (con un volumen de producción de 1000 millones de unidades) sólo se puede lograr en unos seis u ocho años.

Según un estudio de Unisys, a finales de 2006 se producirá un giro más que significativo, ya que se pasará de la fase piloto a la implantación de infraestructuras como elemento esencial de muchos negocios. Por ejemplo, la cadena de distribución Wal-Mart (la número uno a nivel mundial), ya está implantando RFID en algunos centros comerciales.

Alrededor de 15000 empresas españolas la utilizarán dentro de 10 años, según previsiones de AECOC (Asociación Española de Codificación Comercial).

Empresas de distribución

Intel junto a Carrefour, Metro Group y Tesco han formado un grupo de trabajo (EPC Retail Users Group of Europe) en Europa para colaborar de forma conjunta en la mejora de la eficiencia en las cadenas de suministros, acelerando, al mismo tiempo, la adopción de la tecnología llamada Codificación Electrónica de Productos (Electronic Product Code, EPC). Esta tecnología hace posible la identificación a distancia y sin cables de objetos a los que se les ha incorporado etiquetas electrónicas.

IBM ha lanzado al mercado nuevos servicios y software con el objetivo de acelerar la adopción de las tecnologías de identificación por radiofrecuencia. Con una inversión de 250 millones de dólares, IBM llevará RFID a impresoras, consultoría sobre privacidad y kits para la implantación de RFID en la cadena de suministro.

Aunque hay escépticos respecto a esta tecnología, es probable que se equivoquen. Lo mismo sucedió con los código de barras hace treinta años, muchos minoristas la consideraron costosa imperfecta e innecesaria, sin embargo actualmente estos códigos se encuentran en el 87% de los artículos de compra habitual.

Gen 2

Durante el año 2005 se han logrado avances importantes, tales como la puesta en marcha en la normativa ISO que hace posible el uso de un único marcador seguro en todo el mundo y que ayudará a su adopción en todo tipo de industrias.

Este estándar está basado en la norma ISO 18000-6, que fue aprobada en diciembre de 2004. No fue fácil aprobar esta norma (abreviatura de EPCglobal UHF Generation 2), ya que la empresa Intermec trató de frenar su desarrollo porque decía que incumplía patentes suyas relacionadas con el sistema de radiofrecuencia. Finalmente no infringía las patentes de dicha empresa, aunque bajo alguna forma de lectura si tendría los derechos.

Que es el RFID

Básicamente es un método de almacenamiento y recuperación de datos remotos que utiliza unos dispositivos denominados etiquetas o “tags” RFID. El gran avance tecnológico se encuentra en las etiquetas, pues contienen antenas que les permite recibir y contestar peticiones por radiofrecuencia desde un emisor o receptor. Hay dos tipos de etiquetas, las pasivas no necesitan alimentación eléctrica interna (la mínima corriente eléctrica inducida en la antena por la señal de escaneo de radiofrecuencia proporciona suficiente energía al circuito integrado CMOS de la etiqueta para poder transmitir una respuesta), mientras que las activas sí lo requieren (las más pequeñas tienen un tamaño aproximado de una moneda).

RFID Wal-Mart. Rafael Barzanallana
El objetivo de estos sistemas es permitir que se puedan transmitir datos mediante la etiqueta para ser leídos por un receptor y procesados según una aplicación concreta. Por ejemplo pueden dar información sobre identificación o localización, o ser específicos de un producto marcado con la etiqueta como ejemplo el precio, el fabricante, la fecha de caducidad....

Lucha contra la piratería

Shanghai (República Popular China) será la primera ciudad china que va a utilizar etiquetas con esta tecnología, para luchar contra la piratería, según noticia aparecida en un periódico chino. En este país la piratería es un problema, según datos de la BSA, el 90% de los programas que se comercializa en el país más poblado del mundo son ilegales.

Mediante la utilización de etiquetas RFID (actualmente las hay con dimensiones de 0.4 mm × 0.4 mm, y más finas que una hoja de papel siendo prácticamente invisibles) el software y los CDs serán más difíciles de manipular y falsificar. Las autoridades chinas tienen pensado aplicar el sistema en otros ámbitos, como control de productos y mercancías y la identificación de sustancias peligrosas y químicas.

Las tarjetas de crédito, como MasterCard, en un futuro próximo tendrán también incorporado el estándar RFID, ya que las de banda magnética son muy vulnerables al fraude.

Empleo de RFID

Ya hay bastantes aplicaciones, aunque suelen darse a pequeña escala y en muchos casos sólo de forma experimental.

    Tarjetas de bonobús en servicios de transporte público

    Control de accesos de vehículos

    Identificación de pacientes

    Implantes en animales y en humanos

    Gestión de equipajes

    Pasaportes y otros documentos oficiales

    Gestión de mercancías en general