Durante esta campaña se siguió trabajando en torno a las naves 1 y 2, las cuales formarían una nueva área de trabajo o torcularium.

Se amplía la excavación hacia la zona noroeste. La capa superficial retirada estaba formada por un nivel de tierra compacto y marrón, con piedras y abundantes fragmentos cerámicos (sobre todo tejas y ladrillos). Bajo este nivel documentamos diversas estructuras murarias: un muro de mampostería, mortero de cal y restos de enlucido, con un grosor de 0,60m, de 7,24m de largo, con orientación NE-SW, otro muro realizado con los mismos materiales, de 0,60m de grosor, de 6,15m de longitud, en dirección NW-SE, adosado al anterior, y por último otro muro con dirección norte, del mismo grosor y material constructivo, de 12,50m.

Los Villaricos Villa Romana - Torcularium

Al seguir excavando este espacio, documentamos un nivel de derrumbe, con tejas, ladrillos y restos de argamasa de cal. Bajo este nivel, encontramos dos muros en ángulo recto, en el centro de la nueva estancia, realizados con mampostería trabada en seco. Al norte de esta estructura, documentamos la existencia de una gran mola, una estructura circular que serviría para recoger el molturado, por lo que esta nueva sala se trata de la sala de molienda.

En la nave 1 terminamos de excavar el sondeo comenzado en la campaña anterior, llegando a la roca madre, la cual está recortada para la construcción del muro, a modo de fosa de cimentación. Esta nave sería la zona de prensado.

En la nave 2 también se terminó el sondeo comenzado ya en la campaña anterior, llegando al nivel de pavimentación de la sala, con un estrato de tierra compacta marrón oscura y vetas amarillentas. Después, se retiró todo el nivel de derrumbe que se encontraba sobre este pavimento, documentándose el muro que cierra la nave por el lado oeste, de mampostería y mortero de cal. Esta sala, la nave número 2 estaría dedicada al accionamiento de las prensas de viga.

Por último debemos comentar algunos de los restos arqueológicos encontrados durante esta campaña. Entre ellos destacan restos de sigillata africana, usada como vajilla fina de mesa, fragmentos de cerámica común romana, contenedores anfóricos africanos, etc. Las piezas cerámicas dedicadas a las actividades de cocina están realizadas tanto a torno como a mano. Destaca a su vez una lucerna completa realizada en cerámica común. En cuanto a los materiales constructivos debemos destacar la existencia de fragmentos de tejas (imbrices y tegulae) y ladrillos (lateres y semilateres). También se han encontrado fragmentos de piezas de vidrio, monedas, clavos de hierro, restos óseos de animales (ovicápridos, équidos, aves) y carbones.