Ya estamos en noviembre y, aunque según la UE nuestro proyecto empezó en septiembre, la realidad es que la burocracia del comienzo de los proyectos solo nos ha dejado empezar ahora con el proyecto.

En los proyectos Erasmus + (como es el caso de ESSENCE), nos reunimos periódicamente (cada vez en una de las sedes de nuestros socios), para trabajar sobre todo en aspectos de organización que son más difíciles de coordinar a distancia. En este caso y al ser nuestro primer “meeting”, nos hemos reunido en el Instituto Fontanile Anagnino que son la escuela que ejerce como coordinadora del proyecto.

Ha sido una oportunidad estupenda de conocernos, de “ponernos cara”, de precisar los objetivos de lo que queremos hacer, de organizar el calendario, de hacer red y de empezar a trabajar.

Hemos aprendido que en Suecia el Framtidsfrön lleva años haciendo trabajo con profes y coles para el desarrollo de la competencia de emprendimiento (estuvimos probando algunas de sus actividades) y que todas las personas que estamos en el proyecto compartimos una perspectiva social de lo que es el emprendimiento.

Además, conocimos la escuela de nuestros coordinadores y eso siempre es una experiencia fabulosa. Los chicos y chicas del Fontanile nos contaron algunos de los proyectos relacionados con la competencia de emprendimiento que hacen con sus profes y pudimos hablar de nuestras preocupaciones respecto de lo que podemos y no podemos hacer en el proyecto. Además, nos regalaron lo que es nuestro amuleto de ESSENCE, una peonza, como símbolo de que hay que ponernos en marcha y que cuando empecemos a movernos, empezará la diversión.

No sería justo no hacer una mención especial a nuestros fabulosos anfitriones y agradecer sinceramente la oportunidad de estar con ellos estos dias.

Ahora sí, hemos empezado…