La EM es un trastorno desmielinizante que afecta al SNC y que se caracteriza por la triada de inflamación, desmielinización y gliosis (tejido cicatrizal). Su evolución puede incluir recidivas-remisiones, o ser progresiva, determinando así varios tipos de EM. El paciente que nos ocupa fue diagnosticado de EM recurrente-remitente, que comprende el 85% de los casos de esta enfermedad y se caracteriza por ataques discretos con evolución de días o semanas, pudiendo a menudo producirse la recuperación completa en las semanas o meses siguientes.

Ningún signo o prueba clínica aislados confirmarán el diagnóstico de EM. Éste se corrobora siguiendo unos criterios que exigen documentar dos o más episodios de síntomas y dos o más signos que reflejen alteraciones en los fascículos de sustancia blanca anatómicamente no vecinos del SNC, objetivados mediante RMN. Dichas alteraciones se observan en la RMN como áreas focales de hiperintensidad en T2, siendo el 33% hipointensas en T1. Estas hipointensidades pueden constituir un marcador mejor de la desmielinización que las lesiones hiperintensas en T2, aunque depende del momento de captura de la imagen, teniendo en cuenta que la mayoría de lesiones agudas ponderadas en T2 con contraste de gadolinio muestran oscurecimiento en T1.