El ostesarcoma es el tumor óseo maligno más habitual,
generalmente durante la segunda década
de la vida (adolescentes y niños). Las
localizaciones más frecuentes (75%) son
las áreas metafisarias adyacentes a la
rodilla o al hombro, a las manos, a los
pies, al cráneo y a las mandíbulas.
Aparecen lesiones líticas u
osteoblásticas localiadas, con bordes
borrosos y formación de hueso reactivo
subperióstico prominente, e invade
libremente las partes blandas
adyacentes.
Metastatiza con rapidez en pulmón (98%), hueso (37%),
pleura (35%), corazón (20%), y con menor
frecuencia en otros órganos.
El tratamiento de este tipo de tumores es una combinación
de quimioterapia neoadyuvante y
coadyuvante junto con cirugía. El
pronóstico depende del estadiaje y de
la respuesta a quimioterapia.