La ecografía más la
mamografía son un tándem excelente para
el diagnóstico de las lesiones mamarias.
Aunque el rendimiento diagnóstico de la
ecografía es superior al de la
mamografía en los casos de parénquimas
mamarios densos.
La combinación de
mamografía y ecografía es fundamental
para la evaluación de los nódulos o
asimetrías de densidades detectadas en
los mamogramas.
Para la evaluación optima
mediante imagen, debe utilizarse un
traductor de por lo menos 7 MHz,
(idealmente, de 10 MHz o mayor), para
realizar una ecografía mamaria.
Las indicaciones de la
ecografía mamaria son:
·
Evaluación de los nódulos
mamarios encontrados en mamografía.
·
Estudio de lesiones
ocultas en mamografía.
·
Embarazadas y mujeres
jóvenes (<30 años) y mujeres lactantes.
·
Mama masculina.
·
Procesos inflamatorios:
mastitis, abscesos.
·
Mamas densas.
·
Como guía de
procedimientos intervencionistas:
punción de quistes, PAAF, BAG, biopsia
asistida por sistema de vacio (BAG),
inserción de arpones prequirúrgicos.
·
Evaluación axilar en
mujeres con sospecha de lesiones
malignas o diagnosticadas de carcinoma
de mama.
·
En pacientes postoperadas.
En la ecografía los
nódulos benignos presentan:
·
Forma ovalada:
orientación paralela a la piel.
·
Hiperecoico o de
ecogenicidad intermedia homogénea.
·
Macrolobulación (bi o
trilobulación).
·
Bordes bien definidos:
ecogénicos-seudocápsula fina.
Los nódulos sospechosos
de malignidad presentan:
·
Orientación vertical-no
paralela.
·
Bordes irregulares-mal
definidos-microlobulación-espiculados.
·
Hipoecogénico.
·
Sombra acústica
posterior.