Este tipo de secuencia es de gran utilidad para detectar lesiones músculo- esqueléticas, ya que al quedar la grasa hipointensa (supresión grasa), se visualiza con más detalle la rotura y el edema (líquido hiperintenso, T2).
Diagnóstico final: Rotura muscular grado 2.
Las pruebas de imagen pudieron confirmar la presencia de una rotura parcial del tercio inferior y unión miotendinosa del recto anterior derecho en su región profunda.
Las roturas musculares se dividen en tres grados:
- Grado 1: Es la más frecuente y corresponde a una rotura microscópica en la que sólo unas fibrillas musculares son lesionadas. A veces pueden acompañarse de una lesión vascular, apareciendo un pequeño hematoma. Clínicamente se suelen manifestar con dolor, el cual con reposo suele disminuir pero que se reproduce con la presión o el movimiento.
- Grado 2: son las típicas roturas parciales y su etiopatogenia es similar a la de primer grado, con la única diferencia de que el número de fibras musculares afectadas es mayor, pero sin llegar nunca a afectar por completo el cuerpo muscular. Con la ecografía se pueden visualizar la lesión muscular y el hematoma acompañante. El tratamiento incluye reposo relativo durante 4 a 10 días, apoyando lo menos posible el miembro afecto, utilizando vendaje compresivo del músculo, hielo y analgésicos/AINE..
- Grado 3: rotura completa. Compromete el vientre completo del músculo, con una separación de los extremos por retracción de éstos e interposición. Generalmente aparece un hundimiento en la zona afectada, que se denomina “signo del hachazo”, y cursan con un dolor intenso e impotencia funcional completa. El tratamiento de este tipo de roturas es quirúrgico. |
