|
||
Mª Carmen Ruiz Guerrero (Universidad de Murcia) |
|
Visite la página de South ParK Ya ha sido propuesto y justificado suficientemente el análisis sociolingüístico de textos literarios (Jiménez Cano, 1996), teniendo en cuenta que una obra literaria supone la creación de un universo ficcional, de una pequeña sociedad en la que la variación lingüística también tiene su significado [1] . Pero el análisis sociolingüístico puede ir más allá, cabe su aplicación con resultados muy interesantes en el campo cinematográfico o incluso en las series de televisión. Se vuelve entonces al mundo de la oralidad, aunque sea construida de forma artificial, de la que parte inicialmente esta disciplina. La elaboración previa de todo un mundo lingüístico y social nos ofrece un conjunto de variedades a las que se buscará un valor específico en el texto. Ya no tendremos su desarrollo espontáneo, sino que aparecerán en boca de los personajes por y para algo. Esto es lo que sucede en la serie de dibujos animados para adultos South Park, en la que la crítica social y el humor adquieren carta de naturaleza a través de la particular forma de expresarse de cada uno de sus personajes, a través sobre todo de la alteración del sistema de interdicciones lingüísticas propio de una sociedad que parece encontrarse en crisis. A este aspecto será al que mayor atención prestemos en el presente trabajo, al análisis sociolingüístico de una comunidad de hablantes de un pequeño pueblo ficticio, South Park, en Colorado (Estados Unidos), como burla a una sociedad que ha dejado de tener claro qué es lo que puede o no puede decirse, reflejando la duda en cuanto a lo que debe o no debe hacerse. Para llevar a cabo este análisis, seguiremos las pautas marcadas por el profesor Jiménez Cano en su “Bosquejo general para el comentario sociolingüístico de textos literarios” (Jiménez Cano, 1996), situando en primer lugar el marco temporal y espacial y describiendo el perfil de los informantes, para a continuación analizar las variedades lingüísticas relacionadas con la prohibición y su violación presentes en el texto. Tomaremos para ello cinco capítulos concretos de esta serie, transcritos en el anexo, aunque citaremos también otros ejemplos. A) Enfoque correlacional externo: 1.- MARCO ESPACIO-TEMPORAL. 1.1.- Marco espacial: Cada uno de los capítulos de esta serie norteamericana transcurre en un pequeño pueblo montañoso en Colorado. Este pueblo, al que algunas veces se llama ciudad, es el que da título a la serie: South Park.
No tenemos datos exactos sobre el número de habitantes, pero podemos hacernos una idea, ya que se habla de que hay un centenar de niños:
Parece un pueblo próspero, pues tiene una biblioteca, una clínica de rinoplastia, una casa de apuestas, un gran ayuntamiento, una escuela con unas buenas instalaciones deportivas, y el número de pobres no parece importante (de hecho sólo se nombra a la familia de Kenny). Un ferrocarril pasa por sus tierras, lo que supone una importante vía de comunicación. El ámbito es esencialmente urbano. Aunque hay ganadería, pues las vacas se ven ir de aquí para allá, las actividades que se presentan son propias de una ciudad pequeña, no de un ámbito rural. Con referencia a los dominios que aparecen representados, vemos que son de una gran variedad: familia, amistad, religión (cristiana o judía), escuela, política, deportes... 1.2.- Marco temporal: En cuanto al tiempo en el que se sitúa la acción de los capítulos, ésta transcurre en algún momento de los años noventa. Podemos saberlo por los personajes famosos que aparecen, y por la edad aproximada que tienen: Don King es ya muy mayor, también Shirley Temple; de Barbra Streisand se dice que es “una vieja loca que quiere hacerse pasar por una de cuarenta y cinco” (p. 102), aparecen también Enrique Julio Iglesias [sic] y Ricky Martin, entre otros personajes del espectáculo, que nos orientan sobre el marco temporal. En cuanto al cronolecto de los personajes, se divide esencialmente en dos variedades: la de los niños de ocho años y la de los adultos. 2. MARCO SOCIAL. PERFIL DE LOS INFORMANTES. Los informantes principales son cuatro niños de ocho años: Eric Cartman, Kyle Broflovski, Kenny McCormick y Stan Marsh, que acuden a la escuela primaria de South Park. Eric Cartman: Tiene ocho años. Es hijo de madre soltera. Pertenece a la clase media (su situación económica es bastante buena. Tiene una casa con jardín y su madre organiza grandes fiestas para celebrar su cumpleaños). No sabemos la profesión de su madre, pero se habla de unas fotos en una revista pornográfica. Su familia es cristiana. Kyle Broflovski: Tiene también ocho años y pertenece a la clase media. No sabemos la profesión de sus padres, aunque sí que forma parte de una familia judía. Tiene un hermano pequeño, Ike. Kenny McCormick: Igualmente de ocho años. Su familia tiene un nivel económico bajísimo. No sabemos la profesión de sus padres (sólo que su padre es alcohólico). Su familia es cristiana. También tiene un hermano más pequeño. Stan Marsh: Tiene como los demás ocho años. Pertenece a la clase media. Tiene una hermana mayor. No sabemos la profesión de sus padres. Aparecen otros niños, pero su presencia no es constante. Los que más intervienen en este segundo nivel son Wendy, una niña hippie de ideales ecologistas, y Pipi, un niño que pertenece a una familia acomodada y del que todos se burlan. Otros niños son Bebé, Clay, Damián, Terrance (e incluso algunos más de los cuales desconocemos el nombre, lo que Jiménez Cano llama “personajes no bautizados” (1996: 163)). Entre los adultos, los informantes bautizados más importantes son el Señor Garrison y Chef. El Señor Garrison es el maestro de los niños, que ronda la cincuentena. Chef es el cocinero del comedor escolar, tiene entre treinta y cuarenta años, y es de raza negra. Otros informantes adultos son la Alcaldesa, Jesús, el diablo, los padres de Kyle, la madre de Cartman, los padres de Stan, su abuelo, Jimbo (tío de Stan, que tiene una tienda de armas y sólo ha hecho hasta la primaria), Ned (que también terminó únicamente la primaria), el científico loco, el sacerdote, famosos como Barbra Streisand, Robert Smith, Sidney Poitier, Leonard Maltin... Aparecen también presentadores de televisión, comentaristas deportivos, un arqueólogo... Estos personajes irán yendo y viniendo a lo largo de los diferentes capítulos. B) Enfoque correlacional interno relativizado: 1.- Los PARÁMETROS que se utilizan para situar a los informantes suelen aparecer de manera explícita en las conversaciones, sobre todo la edad y los de carácter ideológico o étnico. Los personajes son conscientes de sus diferencias, y a menudo las utilizan para atacarse unos a otros, burlándose de su religión, de su nivel económico, de su ideología... Son fundamentales para su forma de actuar tanto su ideología como su religión, sin embargo no hay una diferenciación lingüística acentuada por pertenecer a un sexo o a otro. Las únicas diferencias a este respecto vendrán de la mano de los homosexuales que aparecen en la serie, especialmente el Gran Al (su tono de voz es más agudo y utiliza expresiones como “súper”, “ilu”, diminutivos, interjecciones como “¡uuuy!”, que intentan caracterizarlo). 1.1. Profesión (hay personajes cuyo rasgo más característico es la profesión, y según ésta hablarán, utilizando a menudo un lenguaje específico):
1.2. Edad (define a los personajes principales, los niños). Su lenguaje se caracteriza por un uso abusivo de tacos e insultos. En uno de los capítulos (que no ha sido recogido en este trabajo), todo el pueblo de South Park marcha a Nueva York para quejarse ante una cadena televisiva por la influencia del lenguaje obsceno de “Terrance y Philip” en sus hijos.
1.3. Religión: Es un parámetro fundamental en varios capítulos, dado que el conflicto surgirá de las diferencias religiosas de la comunidad y de las expresiones usadas para referirse a ellas. También serán importantes las frases religiosas, usadas en contextos muy diferentes:
1.4. Grupo social:
1.5. Etnia y raza: A menudo suscitan un tono despectivo en los que se refieren a ellas.
1.6. Nivel educativo:
1.7. Estrato social:
2.- VARIEDADES SOCIOLINGÜÍSTICAS DE SOUTH PARK: 2.1.- Variedades sociolingüísticas explicativas: Están relacionadas con las actitudes lingüísticas. Se hacen juicios de valor en torno a una determinada variedad. Entran en juego las variedades lectales, contextuales e idiolectales. a) Explicativas autoevaluadoras: Son los propios hablantes los que reflexionan sobre su variedad y la comentan, valorándola positiva o negativamente. a.1) LECTALES: -Intralingüísticas: Aunque por lo general no se hace una reflexión sobre la propia variedad, simplemente se habla, sí aparece en el capítulo, que no ha sido transcrito para este trabajo, en el que los padres se quejan de la vulgaridad del lenguaje usado por “Terrance y Philip”, lenguaje que está afectando a la manera de hablar de sus hijos. Los niños se defienden afirmando que no influye en absoluto. Se verá poco después la hipocresía de los padres, que utilizan ese mismo lenguaje vulgar que intentan erradicar de la televisión. -Interlingüísticas: Parece que no hay ninguna consideración autoevaluadora sobre las distintas variedades interlingüísticas, aunque hay personajes como Wendy en el capítulo en el que llega la sustituta del señor Garrison, que también habla árabe. a.2) CONTEXTUALES: -Tono: Tampoco es abundante, pero aparece en algunos casos en los que el hablante intenta convencer al interlocutor de su bondad.
-Campo (temas):
-Campo-medio:
b) Explicativas heteroevaluadoras: Más importantes que las variedades lectales en la conciencia de los hablantes de South Park, veremos que lo son las contextuales. Se atiende al tono utilizado, que a menudo se convierte en ofensivo, a los temas, en torno a los cuales girará cada capítulo, y en menor medida al medio o al canal, pues casi siempre es el oral. Cuando éste aparece lo hace combinado con el tono o los temas. b.1) LECTALES: -Intralingüísticas: No se presta una atención especial a las variedades lectales intralingüísticas, a no ser, como decíamos más arriba, en el capítulo en el que los padres se quejan de la forma grosera de hablar de los personajes de “Terrance y Philip”, una serie supuestamente para niños.
-Interlingüísticas: Aunque, como veremos más adelante, la presencia de diferentes lenguas en la serie es bastante importante (sobre todo de imitaciones fonéticas de lenguas concretas), no parece que los habitantes le den demasiada importancia, al menos no se suelen hacer comentarios sobre su diversa utilización. De todos modos, podemos ver una muestra:
b.2) CONTEXTUALES: -Tono:
-Campo (temas):
-Tono - temas:
-Temas - medio:
-Tono - medio:
-Tono - temas - medio:
No se producen reflexiones acerca del modo de hablar de las personas concretas (idiolecto), aunque veremos cómo sí hay personajes que se caracterizan por sus particularidades lingüísticas, sobre todo fonéticas. 2.2. Variedades sociolingüísticas descriptivas. Una vez que hemos visto cómo los habitantes de South Park se ven a sí mismos según su forma de hablar, vamos nosotros a obtener nuestras propias conclusiones. Después de observar de manera general las distintas variedades que nos encontramos, haremos un estudio detallado de la disfemia y el lenguaje prohibido, y cómo se utilizan en el texto para crear humor y encauzar la crítica social. a) VARIEDADES LECTALES: -Intralingüísticas: Aunque varían dependiendo de los distintos dominios que aparecen en la serie, el sociolecto más usado es el subestándar, caracterizado por el uso de interjecciones, tacos, insultos groseros...; los niños son sus mejores representantes. Aún así, tiene también un papel importante el sociolecto mesoestándar, pues hay personajes que lo utilizan aunque inserten algunos tacos en su discurso. Otras veces (puede ser por ejemplo en el discurso político) se emplea el supraestándar, pero no es lo habitual, y siempre suele ir acompañado de un propósito inicial. Se percibe a menudo como un fingimiento. No se hallará la influencia de los dialectos geográficos, quizá debido a la traducción al español de lo que originariamente estaba escrito en el inglés de Estados Unidos. En este ámbito podemos hablar de la utilización del discurso religioso, no sólo en su dominio particular, sino en toda la serie, especialmente en interjecciones, personajes y referencias a celebraciones religiosas. Lo que suele denominarse “sacrolecto” estaría relacionado en este caso con el cristianismo y el judaísmo.
Otros ejemplos de variedades circunscritas a un dominio concreto son el lenguaje deportivo y el lenguaje político, pero esto lo veremos al describir las variedades contextuales. Relacionado con la edad y con el dominio escolar encontramos una peculiaridad interesante, la de utilizar las palabras acortadas: profe, cole... También conectadas con esta variedad nos encontramos expresiones como “guay”, “dabuten”, “mola”... (De cualquier manera, no debemos olvidar que nos encontramos ante una traducción).
-Interlingüísticas: Como decíamos más arriba, en la serie aparecen a menudo otras lenguas con las que se va jugando. Español – inglés: Nosotros hemos llegado a ella a través de una traducción al español, pero no debemos olvidar que la versión original está pensada en el inglés de los Estados Unidos. Esto provocará ya un juego inicial, pues accederemos a las conversaciones en español, pero los textos escritos que aparecen en la serie están en inglés (carteles, pizarra, nombres de los establecimientos...). Estos textos proporcionarán un nuevo campo de intervención. El español aparece, por ejemplo, en la pizarra de la escuela el día del concurso de redacción, y es utilizado también en su variedad disfémica (este capítulo no ha sido transcrito):
Podemos relacionar este hecho, que precisamente aparezca el español en su forma disfémica, con los estereotipos lingüísticos que funcionan en Estados Unidos. Es muy interesante en este sentido uno de los capítulos de la serie en el que Eric Cartman busca a su padre. Según va pensando que pertenece a un grupo social o a otro Eric cambia su forma de vestir, de peinarse, y también de hablar. Otros casos de doblete español – inglés surgen por la traducción, pues en ocasiones no se traducen las canciones, o aparecen en el mismo capítulo unas veces traducidas y otras no:
Japonés: Es usado en el capítulo en el que Barbra Streisand se convierte en MegaStreisand. Se imitan las series de dibujos animados japonesas que están ahora mismo muy de moda, del tipo de Bioman o los Power Rangers. Los personajes que se transforman utilizan una imitación del japonés en el momento de su conversión biónica, y al mismo tiempo que se producen las luchas hay un personaje nipón que canta en japonés con un micrófono en la mano. En realidad lo que se maneja es una lengua ficticia que “suena a japonés”. Estos personajes muestran un tipo especial de diglosia, en el que se utiliza el inglés - español cuando son humanos y el japonés cuando son personajes biónicos.
Etíope: Ya veíamos este ejemplo al hablar de las variedades explicativas heteroevaluadoras. En este caso los niños sí expresan su opinión sobre la variedad que acaban de conocer, calificándola como “ruidos muy guays”. Árabe: Aparece en el capítulo en el que Wendy decide librarse de la nueva maestra, que ha hecho que Stan deje de hacerle caso. No sólo hablan en árabe los militares que aparecen para llevársela, sino la propia Wendy, que nos muestra su carácter bilingüe. Ruso: El ruso no aparece en contacto con los habitantes de South Park, sino en la estación M.I.R., que saldrá en el capítulo en el que ésta cae sobre el pueblo (concretamente sobre Kenny) y todos se convierten en zombies. Los traductores han decidido dejar los subtítulos en inglés y no traducir el fragmento al español, con lo que tenemos un nuevo nivel lingüístico. Latín: Es la variedad que emplea Satanás cuando va a aparecer en la Tierra (y que traduce Damián, su hijo), sin embargo una vez que ya está en South Park utiliza el español - inglés. Estamos pues, al igual que con el japonés, ante un caso de diglosia. También en latín aparece la canción satánica que se oye siempre que Damián hace de las suyas.
b) IDIOLECTOS: Hay personajes que se definen por el uso de determinados rasgos idiolectales. Cartman, por ejemplo, aún no sabe pronunciar la [ r ] ni la [ s ], convirtiéndolas en [ d ] y [q], respectivamente. Ike, el hermano de Kyle, es todavía muy pequeño, y hablará, como se dice coloquialmente, “con media lengua”, deformará algunas palabras y de otras sólo pronunciará la mitad:
Por otro lado, nunca entendemos las frases de Kenny, pues la capucha le impide hablar bien (es curioso el hecho de que los habitantes de South Park sí lo entiendan y nunca se haga referencia a esta peculiaridad). Lo veremos más adelante al hablar de los silencios. Otro caso interesante es el del señor Garrison, que cambia de registro cuando habla a través del señor Sombrero, un muñeco de ventriloquia que funciona como su alter ego. Aunque hay excepciones, por lo general el señor Sombrero es mucho más grosero, podríamos pensar que también mucho más sincero, pues reflejaría los auténticos sentimientos del SEÑOR GARRISON:
Chef suele utilizar menos tacos que el resto de los personajes, caracterizándose por sus referencias al sexo y por expresarse a menudo cantando. Cualquier canción que empiece, con cualquier tema, acabará tratando sobre las relaciones amorosas y sexuales:
(Música) Somos buenos y únicos, por nuestras diferencias somos ricos, porque aunque no sea igual el color de la piel, o piense diferente éste o aquél, no significa que no pueda amaaarte (cambia el fondo, que aparece con rayitas y colores), y tocar tu suave piel, que mi avispón penetre tu dulce panal de miel, (imágenes de Chef con distintas mujeres) frote tus piernas, acaricie tus muslos (de repente se da cuenta de que ha cambiado de tema)
Ned, el eterno compañero de Jimbo, se caracteriza por sus frases cortas y su acento robotizado. El oficial Barbrady por su descuidada forma de hablar, que lo acerca al nivel subestándar:
Entre los personajes que sólo aparecen en un capítulo conocemos al Gran Al, que utiliza expresiones como “ilu”, “súper”, diminutivos, interjecciones como “¡Uuuy!”... Su tono de voz es muy agudo. De todos modos se puede considerar como un representante del discurso gay, perdiendo entonces su variedad el carácter de idiolecto.
c) VARIEDADES CONTEXTUALES: Dejamos para el final las variedades contextuales, por ser las que mayor importancia tienen para este estudio. En este nivel de análisis se localiza el uso de tacos, de insultos, de eufemismos..., que caracterizan todo el discurso de esta serie divertida y transgresora. Tanto los temas del campo de discurso como los tonos (estilos) están fuertemente condicionados por las parejas querer / no querer; poder / no poder; saber / no saber y deber / no deber. c.1) SABER / NO SABER: Con el saber / no saber decir están relacionadas por ejemplo las lenguas especializadas, unidas a su vez a determinados ámbitos temáticos, que sólo podrán ser utilizados por aquéllos duchos en la materia. Éstas también hacen acto de presencia entre las gentes de South Park, o entre los que vienen a visitarlos:
A los lenguajes especiales se oponen en el no saber las llamadas palabras ómnibus (Ullmann, 1976: 260), a las que se recurre cuando no se conoce la expresión específica que designa una realidad. Se trata de palabras o expresiones con un significado muy amplio y de carácter general (en español, la palabra ómnibus por excelencia es cosa):
Otros dominios presentes en la serie que tienen sus propios modos de expresión, su propio lenguaje, con sus temas y sus tonos, son la política, el lenguaje de la enseñanza, el deporte, el discurso religioso, el discurso amoroso o la arenga militar. También los autores de los diálogos se burlan de los convencionalismos que rodean a estas áreas de la comunicación humana, transformándolas, cambiándolas de su contexto natural o simplificándolas en exceso: Discurso político:
Lenguaje de la enseñanza:
Deporte:
Discurso militar:
Arenga militar [3] :
A propósito de este tipo de discurso nos dice Germán Moya Hernández en su Tesis de Licenciatura (1998: 101): Si tratamos de adentrarnos en la psicología colectiva de las guerras, debemos comenzar señalando un acusado cambio de mentalidad en el momento justo de declarar la guerra. Para señalar esa entrada en un mundo psicológico nuevo, todas las sociedades, desde las más antiguas, han acudido siempre a los ritos. En este sentido recordamos que la declaración de guerra es una solemnidad sumamente importante. En los pueblos antiguos, los magos solían realizar rituales donde se simbolizaba la ruptura con el pueblo enemigo. Estos ritos se acompañaban de otros que favorecían la cólera para poner a los futuros beligerantes en una disposición favorable. La solemnidad de este tipo de acto ritual es parodiada en esta intervención del Chef. Sus palabras y su tono son grandilocuentes, pero sus enemigos no son grandes guerreros, sino un puñado de pavos mutantes. La parodia se hace aún mayor cuando esa misma pose es adoptada por los pavos. Discurso amoroso:
Discurso religioso: Se ridiculiza sobre todo al colocar a Jesús en la televisión como un espectáculo más, la burla se acentúa con la pelea en un ring entre un descomunal Satanás y un Jesucristo flacucho:
c.2) PODER / NO PODER; DEBER / NO DEBER En relación con el PODER / NO PODER decir aparece la TRANSGRESIÓN, que se lleva en esta serie a su grado máximo, pues no sólo se modifican los dominios, sus temas y sus tonos para producir una situación de extrañeza que dé paso al humor, sino que se altera todo el sistema de prohibiciones de la norma lingüística. Se violan todos los tabúes, y al mismo tiempo se utilizan determinados eufemismos y se crean otros nuevos. Los insultos son constantes, como también los tacos y los temas que la cortesía impediría tratar a cualquier persona en una sociedad considerada “normal” por los occidentales. No se respeta aquella conocida máxima de no nombrar la soga en casa del ahorcado. Para clasificar los insultos y los tacos acudiremos esencialmente a dos artículos de la profesora Dolores Igualada Belchí, que ha trabajado ampliamente sobre este tema. Dichos artículos son “La interacción conflictiva en español” (1996: 130 - 154) y “El lenguaje prohibido. Aspectos de la transgresión verbal en español” (1995). - LOS INSULTOS: Según la profesora Igualada (1996: 130), el insulto es una de las formas mediantes las cuales se expresa el conflicto en las relaciones interpersonales, se viola el territorio individual de cada uno, rompiendo las normas de la cortesía. El insulto es una agresión personal que afecta a la imagen (positiva o negativa) del interlocutor (1996: 131). Siguiendo a Luque, Palmiés y Manjón (1997: 25) diremos que: El mecanismo de los insultos [...] al parecer es simple: la extensión semántica, la comparación, la adjudicación de propiedades. Por un lado existen las cosas o los seres desagradables o despreciables, por otro la operación de equiparar o igualar la persona insultada con dichos objetos. Por ello, las canteras básicas del insulto serán todas aquellas realidades que, por sus cualidades básicas, o por asociaciones culturales, entren dentro de la esfera de lo bajo, repugnante, escatológico, despreciable, etc. Como podremos comprobar al ver las historias de South Park, el insulto tiene otros rasgos además de los léxicos, se apoya su violencia también en los rasgos prosódicos y en la entonación. Las características que les atribuye Igualada Belchí a este respecto (1996: 134) son un acento más intenso, un tono más agudo (o más grave), una articulación más tensa y un silabeo más pronunciado. Con relación a los estudios sociolingüísticos, vemos cómo el que profiere el insulto parece situarse en una escala social superior a la del insultado, ya sea moral, económica, profesional... Los insultos podrán aparecer, sin embargo, tanto en una relación de igualdad como de desigualdad (existiendo una jerarquía que marque las diferencias). Los insultos, que varían a lo largo de la historia de una comunidad según la evolución de las interdicciones, pueden ser clasificados según una cierta temática, relacionada también con las diferencias sociales. Es interesante tener en cuenta a la hora de analizarlos factores como la edad, el sexo, la procedencia geográfica..., tanto del destinador como del destinatario. Clasificación temática (Igualada, 1996: 137 - 138): a) Referidos a cualidades físicas. a.1) Aspecto.
a.2) Tosquedad.
c) Referidos a cualidades morales.
d) Referidos a cualidades o comportamientos sociales.
e) Referidos al comportamiento sexual (con frecuencia en sentido metafórico): e.1) del ofendido.
Con este insulto el nivel más alto aparece en la canción que Cartman canta para la fiesta de Navidad, en la que se combina con muchos otros insultos:
La mamá de mi amigo Kyle es la puta más fea que Dios creó (también el señor Garrison hace palmas). Una puta rara, una puta mala, pu pu pu putón, pu pu pu putón, pu pu pu putón. La madre de Kyle, la madre que la parióoo. ¡Vieja y puuutaaah! (p. 92).
e.2) de los ascendientes o del cónyuge.
El insulto “hijo / hija de puta” es, con diferencia, el más usado en la serie. El original en inglés es “bastard”, que no tiene las mismas connotaciones que el español “bastardo”, su correspondiente en español es el utilizado en esta traducción: “hijo de puta” (Burgen, 1997: 28) que llega incluso a usarse por estas tierras con tono festivo (lo que Beinhauer (1958: 47-48) ha llamado “insultos ficticios”). En el texto podemos encontrar una variante poco usual, dicha en boca de una mujer anciana, la vigilante del recreo:
Parece que al ponerse en femenino el insulto “cabrón” pierde sus connotaciones sexuales, quedándose únicamente con las de “persona de muy mal carácter”, y quizás “con malos sentimientos”. f) Referidos a la raza o nacionalidad del ofendido.
g) Referidos a la ideología política (o religiosa) del ofendido.
h) Maldiciones (no son propiamente insultos).
i) Otros.
Relacionadas con los insultos, encontramos otras expresiones que reflejan actitudes racistas, aunque a menudo se ha perdido su motivación. Son expresiones fijadas, frases hechas que normalmente no suelen utilizarse con intención ofensiva:
Vemos la cantidad de insultos que encontramos en tan sólo unos pocos capítulos, teniendo en cuenta, sobre todo, que no se han repetido cada vez que aparecían los mismos. Nos damos cuenta, por lo tanto, del carácter transgresor del texto, del caso omiso que se hace a las normas del decoro, que controlan que en cada situación y cada personaje utilice una variedad adecuada. En South Park se insulta en el colegio, en la política, en el deporte..., insultan los padres, los hijos, el maestro, la alcaldesa... Es cierto que en los niños este número se incrementa, y también que las mujeres que aparecen utilizan menos los insultos, pero cuando lo hacen no varían con respecto a los personajes masculinos [5] . Detengámonos ahora en los tacos, otro factor decisivo en el apartado de lo que se debe o no se debe, se puede o no se puede decir, que aquí se distorsiona. - LOS TACOS: Los tacos, como los insultos, son muestras de la transgresión lingüística, de la disfemia. Según Igualada Belchí ”mientras que el taco es una reacción ante una situación, el insulto es una agresión personal” (1996: 131). Se manifiesta la transgresión, por lo tanto, de manera diferente, pero finalmente se dice lo que no debería decirse, lo que está socialmente prohibido. Para clasificar los distintos tipos de tacos me remitiré al trabajo que antes citaba de Dolores Igualada Belchí (1995). En primer lugar, los tacos se clasifican en obscenidades y blasfemias. Las obscenidades pueden se de dos tipos, o sexuales o escatológicas. En esta serie, aunque las referencias a Dios son muy abundantes, no existe sin embargo la blasfemia propiamente dicha, que ha sido sustituida por expresiones como “¡demonios!” [6] ; aparecen en cambio con profusión las obscenidades tanto escatológicas como sexuales, predominando “mierda” en el primer caso y “joder” / “coño” en el segundo. “Joder” equivale al inglés “fuck”, que se emplea en esta lengua como cualquier elemento del lenguaje, convirtiéndose incluso en una muletilla imprescindible (Burgen, 1997: 63) [7] . De cualquier manera no termina ahí la lista de palabras fuertes utilizadas: a) Obscenidades. a.1) Escatológicas.
a.2) Sexuales.
b) Blasfemias:
El disfemismo llega a ser integrado en South Park, sobre todo por los niños, en el lenguaje estándar, perdiendo en parte de este modo su carácter transgresor y su carga ofensiva [8] . Los tacos pasan a formar parte del lenguaje usual de los personajes en cualquiera de los dominios. No ocurre lo mismo para el espectador, que no está acostumbrado a oír a niños tan pequeños usar ese tipo de expresiones (al menos las primeras veces que ve la serie). En este contraste se basa gran parte de la carga humorística de la serie. Aun así, y a pesar de la libertad que parece existir entre los habitantes de este pueblecito estadounidense en el momento de expresarse, veremos más adelante cómo el silencio se impone en muchas ocasiones. Algunas veces, incluso en South Park, hablar sobre determinados temas o la utilización de los tacos está penalizado:
- LOS EUFEMISMOS: Los eufemismos, aunque no son abundantes, son muy significativos. Están relacionados con lo que el profesor Antonio Roldán (1998: 429) llama eufemismos mendaces [9] , que intentan desviar la atención del verdadero problema del que se trata. Estaríamos ante la vertiente negativa de la eufemia:
c.3) EL SILENCIO: También relacionado con las parejas expuestas más arriba está el silencio, que se puede estudiar desde tres perspectivas distintas: la de mayor o menor normalidad (donde se incluyen las patologías), la de mayor o menor cortesía (el silencio puede ser cortés o descortés) y la de mayor o menor voluntariedad (el silencio puede ser voluntario o involuntario). En South Park aparecerá el silencio con diferentes manifestaciones, pero casi siempre relacionado con la interdicción, con el no poder o no deber decir. Uno de los casos que más llaman la atención es el de Kenny McCormick, el niño pobre. El telespectador no entiende nunca lo que está diciendo, pero sí sus compañeros y el resto de los habitantes del pueblo, por lo que no es un silencio total. Por las respuestas que reciben sus intervenciones, silenciadas para nosotros, podemos deducir que están normalmente cargadas de una crítica punzante o del mayor descaro, pero dando siempre en el blanco. Una de las posibles interpretaciones que puede recibir su silencio es la de la falta de voz de los oprimidos, que hablan, pero nadie los escucha, al menos en las “altas esferas”. Kenny lleva siempre una capucha que es la que impide su comunicación más allá de su propio ámbito. Su capacidad comunicativa desaparece completamente en el capítulo en el que Damián, el hijo de Lucifer, lo convierte en ornitorrinco, permitiéndole únicamente decir cua, cua:
Hay otros momentos en los que se impone el silencio, unas veces de manera voluntaria y otras forzada. Cuando el abuelo de Stan le pide que lo mate, Stan busca ayuda en las personas en las que confía, pues no sabe si está bien o no. Todos, el señor Garrison, el Chef, incluso Jesús, le responden de la misma manera: “No contestaré a eso aunque me expriman”. La eutanasia parece ser un tema del que no se debe hablar. En otro momento, en el capítulo en que Jesús se dispone a dar su opinión sobre la homosexualidad, el programa se interrumpe imponiéndole el silencio:
Otras veces se intenta imponer el silencio, porque hay temas de los que no se debe hablar, pudiendo traer incluso consecuencias negativas, pero el emisor olvida la prohibición:
Otro ejemplo de prohibición relacionada con el silencio es la que se produce cuando la madre de Kyle se ofende porque en el colegio se va a representar la Natividad de Jesús. Se llega a tal extremo que se analiza mediante una máquina qué palabras provocan un rechazo en la gente, y por lo tanto no pueden ser mencionadas. Son palabras condenadas al silencio. El uso de esta revolucionaria máquina y el diferente número de pitidos que aparece según la expresión que se analiza está íntimamente relacionado con la relatividad de la interdicción. Como explica Miguel Casas (1985: 40 - 41): [...] hay palabras que no pueden ser pronunciadas en ciertas ocasiones, pero sí en otras; términos tabúes para determinadas personas, zonas geográficas o clases sociales y no para otras, o lo que es pudor para tal hablante o sociedad puede parecer hipocresía ridícula para los demás individuos o comunidades. Por todo ello, el matiz eufemístico de una palabra es, consiguientemente, inestable, efímero y relativo; ofrece -como ha estudiado detenidamente J. da Silva Correia- diferencias sustanciales según la época, lugar, pueblo, clase social, sexo, edad y circunstancias.
El último tipo de silencio que aparece está incluso más relacionado con la censura que los anteriores. En ocasiones, cuando un personaje va a decir algún taco que no se considera apropiado se oye el clásico pitido que lo intenta ocultar, aunque no siempre lo consigue, agudizándose de este modo la burla [10] . Podemos ir viendo que, al igual que sucedía con los disfemismos y los eufemismos, los silencios impuestos por la sociedad son ridiculizados, adoptándose continuamente una actitud crítica apoyada mediante la burla y el desenmascaramiento de las leyes, a veces absurdas, de la sociedad. Comprobamos, pues, una alteración en el campo de las interdicciones. Aparecen nuevos temas tabú (como todo lo relacionado con el cristianismo en Navidad, la eutanasia...). Por una parte se intenta ser políticamente correcto y por otro se insulta y se dicen tacos en todos los ámbitos. Pero la transgresión no queda sólo ahí, pues Kenny, por ejemplo, está obligado a oír contínuamente el motivo de su pobreza, a soportar las risas de sus compañeros, e incluso las de los adultos:
c.4) TONOS Y ESTILOS: Es curioso comprobar cómo incluso hablándose de usted en la mayoría de los casos, los habitantes de South Park se insultan continuamente. Tienen una gran importancia los tonos funcionales, pues los hablantes son conscientes de su tono y lo cambian cada vez que quieren conseguir algo: persuadir mediante la simpatía, imponerse con un tono imperativo... Hay personajes que tienen una facilidad extraordinaria para cambiar el tono, en cuestión de segundos, según sus intereses. Los personajes más representativos a este respecto son Cartman y Barbra Streisand, y por supuesto el señor Garrison, que lo consigue a través del señor Sombrero, su alter ego (como ya explicábamos al ver los idiolectos):
En cualquier caso, el tono dependerá del tema, el medio y el contexto de cada momento determinado. Los tonos personales pueden ser simétricos o asimétricos, dependiendo de que la relación que se establezca sea igual de uno a otro polo. En South Park es interesante, por ejemplo la asimetría con respecto a la relación SEÑOR GARRISON – alumno. Siempre se hablan de usted, en los dos sentidos, pero la familiaridad del maestro con los niños llega a convertirse en insultante cuando éste se expresa a través del señor Sombrero. No se ha encontrado ningún caso en el que los niños hablaran con desprecio al maestro, aunque en una ocasión sí afirman no respetarlo. c.5) MEDIO O CANAL: En South Park, el medio utilizado más importante es el oral, a través de él llegamos a conocer a cada uno de los personajes, su particular forma de hablar, de relacionarse con los demás... De todos modos no se olvida el soporte escrito, no sólo en los subtítulos de otras lenguas, sino en los carteles que aparecen en las paredes de la clase, en la pizarra (por ejemplo el 666 que se lee en varias ocasiones en el capítulo de la lucha entre Satanás y Jesús), los luminosos de las tiendas y de las distintas instalaciones... El soporte escritural también es una vía para conseguir el carácter humorístico de la serie, recordemos por ejemplo la leyenda en español en la pizarra de clase; como ésta aparecían otras en inglés, incluso en las operaciones matemáticas se busca el humor. CONCLUSIÓNHemos hecho un primer acercamiento sociolingüístico a la serie de dibujos animados para adultos South Park, intentando demostrar que también en el cine o en la televisión se puede encontrar un importante campo para la sociolingüística, sobre todo si, como en este caso, gran parte del juego y de la crítica se basa en la manipulación de los usos lingüísticos de una sociedad existente. Se nota sobre todo una vacilación en la consideración de los tabúes, porque se intenta reflejar una sociedad en crisis, en la que los valores están cambiando y aún no se ha llegado a un consenso. Mientras que la muerte parece ser un tabú cuando se habla de la petición del abuelo, que no quiere seguir viviendo, la muerte de Kenny, un niño de tan sólo ocho años, se toma a menudo como una anécdota graciosa (recordemos el comentario de los locutores en el partido de fútbol americano). En cuanto al sexo, parece poder hablarse libremente de él, pero las conversaciones están cargadas de prejuicios y de falsas ideas (el rechazo de la homosexualidad es patente). Sólo Chef será una isla de comprensión y tolerancia, a la que los niños podrán acudir casi en cualquier ocasión para obtener una información fiable y sincera. Se quieren eliminar algunas diferencias hasta tal punto de encontrar sólo un “mojón de Navidad” como punto de encuentro entre las distintas gentes. No se tolera la diversidad cultural y étnica, que pasa de ser rechazable a ser simplemente graciosa (como la forma de hablar de “Paco el Flaco”, que “no ha nacido en un lugar normal como South Park”). Los niños crecen en un mundo confuso en el que conocen todos los tacos, pero no saben lo que significa “colecta”, ni “lavativa”, ni “marsopa”. Cartman parece ser el representante de esa nueva sociedad occidental en proceso de formación: consumista, intolerante, preocupada sólo de sí misma, desconocedora de todo lo que la rodea, pero manipuladora hasta el extremo... BIBLIOGRAFÍAABAD, Mercedes, El cambio de lengua en Orihuela. Estudio sociolingüístico – histórico del siglo XVII, Murcia, Universidad – Caja Rural Central, 1994. BEINHAUER, Werner, El español coloquial, Madrid, Gredos, 1958. BURGEN, Stephen, La lengua de tu madre, Barcelona, Planeta, 1996. CASAS GÓMEZ, Miguel, La interdicción lingüística. Mecanismos del eufemismo y disfemismo. Cádiz, Universidad de Cádiz, 1986. IGUALADA BELCHÍ, Dolores Anunciación, “El lenguaje prohibido. Aspectos de la transgresión verbal en español”, en RLA. Revista de Lingüística Teórica y Aplicada, Concepción (Chile), 33, 1995. IGUALADA BELCHÍ, Dolores Anunciación, “La interacción conflictiva. Los insultos en español”, en Estudios de sociolingüística. Sincronía y diacronía. Pilar Díez de Revenga y José María Jiménez Cano (Eds.), Murcia, DM, 1996. JIMÉNEZ CANO, José María, “Bosquejo general para el comentario sociolingüístico de textos literarios”, en Estudios de sociolingüística. Sincronía y diacronía. Pilar Díez de Revenga y José María Jiménez Cano (Eds.), Murcia, DM, 1996. LUQUE, Juan de Dios, Antonio Pamies y Francisco José Manjón, El arte del insulto. Estudio lexicográfico, Barcelona, Península, 1997. MOYA HERNÁNDEZ, Germán, El eufemismo como nota predominante del discurso polemológico. Tesis de Licenciatura, Universidad de Murcia, Facultad de Letras, Departamento de Lengua Española y Lingüística General, 1998. ROLDÁN PÉREZ, Antonio, “Manipulación de la propiedad lingüística” en Estudios de lingüistica textual. Homenaje al profesor Muñoz Cortés, Universidad de Murcia, 1998, págs.421-433. SERRANO VIVERO, Fuensanta, “Comentario sociolingüístico de un texto literario: El Club Dumas”, pronunciado como conferencia en La variación sociolingüística. Enfoque contrastivo ( I Curso), Universidad de Murcia, noviembre de 1999. ULLMANN, S., Semántica. Introducción a la ciencia del significado. Madrid, Aguilar, 19762. VALENZUELA MANZANARES, Javier y Ana María Rojo López, “Sobre la traducción de las palabras tabú”, Revista de Investigación Lingüistica, 1, Vol. III, 2000, Págs. 207-220. [1] Podemos ver un ejemplo en el trabajo de Fuensanta Serrano Vivero: “Comentario sociolingüístico de un texto literario: El Club Dumas”, pronunciado como conferencia en La variación sociolingüística. Enfoque contrastivo ( I Curso), Universidad de Murcia, noviembre de 1999. [2] El número de página que aparece tras cada ejemplo remite al ANEXO. [3] Para un estudio detallado del discurso polemológico y su utilización en otros dominios ver: MOYA HERNÁNDEZ, Germán, El eufemismo como nota predominante del discurso polemológico. Tesis de Licenciatura, Universidad de Murcia, Facultad de Letras, Departamento de Lengua Española y Lingüística General, 1998. [4] Para las distintas designaciones de la “prostituta” en el español moderno ver: CASAS GÓMEZ, Miguel, La interdicción lingüística. Mecanismos del eufemismo y disfemismo. Cádiz, Universidad de Cádiz, 1986. [5] Miguel Casas (1985: 91): «También el sexo constituirá un rasgo a tener en cuenta. El uso de los disfemismos se incrementará sustantacialmente en grupos de pesonas del mismo sexo, especialmente entre hombres, pues la mujer es, por lo habitual, más conservadora y con más remilgos de pudibundez que el hombre». [6] Estas expresiones sí serían blasfemias en el ámbito anglosajón. [7] Para la traducción de fucking y sus derivados ver: VALENZUELA MANZANARES, Javier y Ana María Rojo López, “Sobre la traducción de las palabras tabú”, (2000). [8] Miguel Casas (1985: 76): «[...] el uso constante y reiterativo de un vocablo disfemístico puede provocar la relajación de sus connotaciones negativas y regularse, por tanto, como término normal o aséptico». [9] «Son eufemismos cuya intencionalidad vulnera el principio de veracidad fundamento de la comunicación. Se trata de eufemismos falsos por cuanto no tratan de amortiguar los efectos ofensivos a la dignidad, initimidad, etc., sino más bien dar a través del nombre la imagen de una acción honesta cuando la realidad de ésta tiene un nombre propio bien diferente y condenatorio de esa acción. Es en el campo de la Economía (recuérdese la ingeniería bursátil), en el campo de las mentes totalitarias y desgraciadamente en el campo de la medicina, donde han proliferado una serie de estos falsos eufemismos que sólo son expresiones engañadoras que distraen de la durísima realidad a la que realmente se refieren» (Roldán Pérez, 1998: 429). [10] Los mismos capítulos, emitidos en Inglaterra, están sometidos a un mayor número de pitidos). |
|