Perfiles: Chelo
Jubilación de Consuelo Martínez Valenzuela: La callada labor de una gran profesional
El pasado día 20 del mes de Diciembre, nuestra compañera Chelo (Consuelo Martínez Valenzuela para los no cercanos) logró felizmente cumplir el deber de desempeñar una vida laboral satisfactoria y plena. Enhorabuena, Chelo.
Formando parte de esa generación de funcionarios de la UM que durante los últimos 40 años han transformado una pequeña universidad de provincias en la universidad de referencia en TIC que es ahora, Chelo comenzó su carrera como Operadora de Consola del primer “mainframe” que tuvo la universidad en lo que era el Centro de Proceso de Datos del, entonces único, campus de La Merced. Adaptándose continuamente con su gran profesionalidad a los continuos cambios tecnológicos, Chelo ha desempeñado de forma eficaz, eficiente y silenciosa un trabajo excelente al que siempre imprimió su característico sello de discreción y callada labor.
Chelo, has decidido que era el momento de decir “hasta la vista” y debes hacerlo con la cabeza bien alta por el deber cumplido y porque dejas aquí en ÁTICA, de cuyo origen -CDP- eres “socia fundadora”, un montón de almas que conocemos tu buen hacer siempre, eficaz y eficiente, sin hacer ruido... Jamás un excusa o un “no puedo”, nunca una queja tuya ni de nadie por tu labor, día a día, en estas largas cuatro décadas que, sin embargo, se han quedado muy cortas para los que ya te añoramos.
Sabemos que esa discreción y pudor que te caracterizan piden que nos abstengamos de públicos homenajes, pero han sido tantos días de convivencia, tantos años de saber que podíamos contar contigo, tantos momentos de silencio compartido y tantas ironías intercambiadas, tanto ejemplo nos has dado y tantas veces nuestros malos ratos has soportado que no podíamos permitir que te alejases sin darte este pequeño homenaje que quiere ser un gran agradecimiento por haber sido un gran ejemplo profesional y por seguir siendo parte de nuestras vidas.
Siempre tendrás un sitio en nuestro corazón.
No te olvides de nosotros.
