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Correos fraudulentos: Phishing, Scam, Sextorsión y Malware

El correo electrónico es la principal puerta de entrada de los ciberdelincuentes en cualquier organización. Basándose en diferentes técnicas de ingeniería social consiguen engañar a los usuarios y robar información confidencial o infectar los equipos con malware. A continuación, os presentamos los tipos de fraudes más comunes.

Correos fraudulentos

Phishing

Posiblemente, se trate de uno de los fraudes más conocidos y extendidos. Se trata de un engaño basado, generalmente, en la suplantación de una empresa o entidad fiable como un banco, una red social o entidades públicas. La finalidad es hacerse con claves de acceso o información sensible como pueden ser datos fiscales o bancarios. El canal mediante el cual se intenta perpetuar el fraude suele ser el correo electrónico, pero también pueden usarse otros como los SMS o aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp.

 

Scam

Se basa en un tipo de correos electrónicos cuya única finalidad es perpetrar engaños y estafas a sus receptores y obtener tanta información personal, de la empresa o bancaria como puedan. El gancho, en este caso, suele girar en torno a falsos premios de lotería, herencias millonarias, ofertas de empleo que requieren de desembolsos, etc., aunque los ciberdelincuentes, cada día, inventan nuevas formas de engaño.

 

Sextorsión

El objetivo es extorsionar al receptor con un supuesto video privado o de contenido comprometedor (que lo más probable es que no exista), amenazando con difundirlo a todos sus contactos de correo y redes sociales a no ser que realice el pago de una cantidad económica. El pago, generalmente, es solicitado en criptomonedas como el bitcoin y el destinatario parece ser el remitente cuando en realidad, no es así.

 

Malware

En este caso, se trata de código malicioso que podría infectar los dispositivos. Los correos podrían contener algún tipo de archivo adjunto o enlaces a webs donde una vez descargado y ejecutado el fichero infectará el dispositivo. La infección también puede producirse al hacer clic en anuncios fraudulentos (malvertising) o aprovechando alguna vulnerabilidad en los navegadores (drive-by-download). Una vez en nuestro equipo, podría distribuirse a través de la red institucional, infectando todo tipo de dispositivos conectados a la misma, como discos duros, pero también otros sistemas de la red e incluso servicios en la nube.

 

Si sospechas que has recibido un correo fraudulento puedes contactar con el Centro de Atención a Usuarios (CAU) mediante estos canales: