La música en la Historia del Arte

Guía de aprendizaje

Guía de aprendizaje

El estudiante deberá tomar un papel activo y participativo en el proceso de su propia formación, de tal manera que se sienta más identificado con él. Esta actitud favorable hacia el aprendizaje, de manera participativa y con espíritu de superación ante las dificultades del mismo, le permitirá adquirir una predisposición para el autoaprendizaje y el trabajo continuo y organizado, que desembocará en la adquisición por su parte de una mayor competencia. Se trata, en definitiva, de conseguir que el alumno vaya adquiriendo capacidades y, al mismo tiempo, autonomía e independencia en su aprendizaje. Este planteamiento trae consigo implícitamente, como necesidad y como ventaja, el que cada alumno sea el que marque su propio ritmo de acuerdo con sus posibilidades.

En el aprendizaje de la música representa un papel fundamental la audición de piezas de los diversos periodos estudiados. Esto no sólo enfrenta a los alumnos directamente con la realidad que constituye el objeto de estudio de la disciplina, sino que les proporciona una mejor comprensión de los diferentes aspectos estudiados. Cuando el alumno tiene la oportunidad de contrastar con la realidad musical aquello de lo que ha tenido conocimiento a través de las explicaciones de clase o de la bibliografía, obtiene un saber suplementario que va más allá del conocimiento intelectual y que pasa a formar parte del conocimiento intuitivo que le proporciona la experiencia de lo vivido.

Esta es, pues, la parte fundamental del proceso que les va a llevar a la consecución de las competencias previstas. Para ello se emplea una metodología activa, basada en la audición de obras musicales.

De este modo, se espera de los alumnos que realicen:

  • Una escucha atenta de la música.
  • Descripciones orales y escritas de la música usando un lenguaje y terminología adecuados.
  • Preguntas sobre la música.
  • Análisis formal básico, discriminando y describiendo los distintos elementos del lenguaje musical.
  • Análisis crítico en diferentes niveles
  • Elaboración y defensa de argumentos racionales sobre la música.

Esta fase del proceso, la audición activa, no puede ser sustituida por nada, ya que consiste en la toma de contacto por parte del alumno con el objeto de estudio, lo que supone la justificación de todo el proceso. En la medida en que estas audiciones se realicen en unas condiciones adecuadas, no se hagan de forma indiscriminada, no sean tan abundantes o extensas como para saturar la capacidad perceptiva, cuenten con un grado de pertinencia apropiado y sean realizadas con una preparación previa oportuna, servirán para enfrentar al alumno con el hecho musical y se constituirán como el modo más operativo a la hora de fomentar la adopción de una actitud hermenéutica y crítica apropiada a su nivel de conocimientos y capacidades.

Las distintas actividades formativas, en lo que respecta al volumen de trabajo del alumno y la metodología docente a seguir, queda de la siguiente manera:

Actividad
Formativa

Metodología

Horas
Presenciales

Trabajo
Autónomo

Volumen
de trabajo

Lección magistral

Teórico-práctica

40

63 103

Seminarios

Práctica

12

6

18

Tutorías

 

8 11 19

Trabajos

Práctica

0 10 10

Total

 

60

90

150

 

Número de horas por crédito ECTS: 25 horas.
Estimación del volumen de trabajo del alumno: 150 horas.