Control de contingencias en la práctica de actividad físico-deportiva

 

Por el simple hecho de realizar una actividad físico-deportiva aumenta la probabilidad de tener un accidente y una lesión. El aumento de las exigencias de los aparatos y sistemas orgánicos, el hecho de interactuar con un entorno a veces no apropiado y cambiante en ocasiones, la presencia de diversos estímulos, la imposibilidad de ejercer un control de todos ellos, tener menos tiempo para analizar las situaciones y responder a las mismas, etc., son situaciones que van a caracterizar en mayor o menor medida a las clases de Educación Física, especialmente en los contenidos de condición física y salud, juegos y deportes, así como en habilidades deportivas.

Estos contenidos quedan reflejados en los Reales Decretos de Primaria (286/2007) y Secundaria (291/2007) al hacer referencia a los aspectos preventivos en la realización de actividades físico-deportivas. Además, en cuarto curso de educación secundaria aparece como contenido conceptual y actitudinal la aplicación y reconocimiento de la importancia de los primeros auxilios aplicados a las lesiones acontecidas en la práctica físico-deportiva. Finalmente, en el Real Decreto de Bachillerato (RD 262/2008) aparece, en el bloque de condición física y salud, la necesidad de trabajar la teoría y práctica de los primeros auxilios.

El profesor de Educación Física debe ser consciente de la necesidad de mantener unas ciertas condiciones de seguridad e higiene en sus clases, con el fin de que la práctica de actividad física resulte saludable (Tercedor y cols., 2000).

Los riesgos propios de la actividad física se asocian con aquellos contextos prácticos que, en cierto modo, pueden comprometer la integridad física, ya sea por un trabajo mal estructurado, uso erróneo del material deportivo, intensidad excesiva, etc. (Latorre y Herrador, 2003). En el caso de que se produzca un accidente y haya una lesión, el profesor será quien se encontrará con la primera responsabilidad de actuación. Para ello debe tener un conocimiento extenso y profundo de las diversas lesiones que podrían darse y cuál es la forma de actuar ante ellas.

Aspectos preventivos en la práctica de la Educación Física.

Un accidente deportivo se define como un acontecimiento imprevisto o esporádico, que ocurre durante la práctica de actividades físico-deportivas. Estos accidentes están mediatizados por una serie de factores de riesgo intrínsecos, relacionados con las características del alumnado, y extrínsecos, relacionados con la propia práctica deportiva. Estos se asocian con aquellos contextos prácticos que, en cierto modo, pueden comprometer la integridad física, ya sea por un trabajo mal estructurado, uso erróneo del material deportivo, sobre-esfuerzo, mala organización espacial, etc (Latorre y Herrador, 2003).

El incremento notable del número de lesiones deportivas en la infancia y la adolescencia en las últimas décadas puede tener como factor de riesgo, entre otros, la reiteración del mismo tipo de gesto deportivo al realizar una única especialidad deportiva.

Las tasas de accidentes en las clases de Educación Física oscilan entre el 0,75-11,7% (Latorre y Herrador, 2003). Las lesiones de extrema gravedad, como daños en el encéfalo o la columna vertebral, así como la muerte súbita por una alteración cardíaca, son excepcionales entre los jóvenes (Latorre y Herrador, 2003). La mayoría de lesiones que acontecen durante las clases de Educación Física pueden clasificarse como leves. Existen estudios que confirman una tasa de fracturas bajas, siendo los esguinces, sobre todo los de tobillo, y las contusiones, las lesiones más habituales.

 

¡Más información sobre la muerte súbita!.

 

Los aspectos preventivos en la práctica de la Educación Física deben establecerse en las decisiones preactivas desde diferentes prismas:

1) Realización correcta y segura de los ejercicios físicos (López-Miñarro, 2000). Hay que tener en cuenta que la realización de ejercicios de fortalecimiento y estiramiento muscular de forma incorrecta puede generar alteraciones en el sistema músculo-esquelético a largo plazo.

Ejemplos:

1.1. Estiramiento de la musculatura isquiosural. Descripción de la tarea: Individualmente realizar una flexión del tronco máxima intentando tocar el suelo con las manos, manteniendo las rodillas extendidas. Análisis del riesgo: frecuentemente los ejecutantes adoptan una postura hipercifótica y con una inversión lumbar marcada, que aumenta el riesgo (junto a otros factores) de repercusiones en el disco intervertebral (protrusiones, hernias discales...) y en las estructura óseas (acuñamientos vertebrales) a largo plazo.

 

 

Papel del profesor en las decisiones preactivas: plantear ejercicios de estiramiento isquiosural donde se mantenga la columna vertebral alineada, puesto que son más efectivos y seguros que aquellos donde se aumentan o invierten las curvas normales del raquis.

1.2. Fortalecimiento de la musculatura abdominal mediante el ejercicio de incorporación del tronco. Descripción de la tarea: en decúbito supino, con rodillas y caderas flexionadas, manos entrelazadas tras la cabeza y pies sujetos por un compañero, elevar el tronco hasta tocar las rodillas con los codos. Análisis del riesgo: un movimiento donde el psoas-ilíaco tiene una gran implicación, con una postura invertida del raquis lumbar al final de la fase concéntrica, sobrepasa el umbral de compresión raquídea saludable (3000 Newton), por lo que los numerosos estudios realizados sobre este ejercicio desaconsejan realizar el mismo. Su uso reiterado se ha asociado a inestabilidad lumbar debido a que favorece la degeneración del disco intervertebral.

Papel del profesor en las decisiones preactivas: plantear alternativas que incidan en la consecución del objetivo y no conlleve los riesgos del anterior. Así, plantear el ejercicio de encorvamiento reduce la compresión raquídea a 2000 Newton y es más efectivo para aumentar la resistencia de la musculatura abdominal de forma más eficiente.

2) Evaluación del estado y uso adecuado de la instalación donde se va a desarrollar la clase de Educación Física (Delgado y Tercedor, 2002; Latorre y Herrador, 2003):

En cuanto a la instalación:

- Una orientación adecuada de la instalación (norte-sur del eje longitudinal de la pista) conlleva disminuir la posibilidad de accidentes por deslumbramiento.

- Análisis del pavimento: eliminar irregularidades y charcos ante la posibilidad de caídas y esguinces. Una fricción baja del pavimento genera una mayor tendencia a deslizarse por la superficie, aumentando el riesgo de traumatismo agudo que puede provocar contusiones, fracturas, erosiones de la piel que se incrementan en presencia de grava, etc. Una fricción alta eleva el riesgo de lesión, principalmente por el mecanismo de torsión y/o cizallamiento articular (Delgado y Tercedor, 2002).

- Retirar piedras, arena, vidrios, etc., que pueden ocasionar heridas incisivas, punzantes y por abrasión.

- Vigilar los contrapesos de porterías y canastas que ya que pueden desplomarse ante un peso añadido.

- Valorar los desperfectos (hierros oxidados) de postes de voleibol, tableros, cables de las redes, enganches de las redes de porterías y aros de las canastas.

- Establecer medidas de evacuación, salidas de emergencia, utilización de extintores.

- Tanto los elementos fijos como los móviles deben presentar las protecciones adecuadas. El equipamiento podrá estar anclado a la pared o bien situado sobre el suelo con contrapesos y/o anclados al suelo pudiéndose utilizar anclajes con un eje móvil, para que en el caso de colisión el impacto sea menor. En caso de que presenten algún saliente peligroso, éste debe estar aislado para evitar su peligro (vértices, tornillos, enganches para redes, etc.).

- Las paredes han de ser lisas, carecer de salientes. Los radiadores han de estar situados bajo ventanas y protegidos adecuadamente. La puertas sin manivela saliente. Con ello se disminuye el riesgo de lesión aguda, evitándose raspaduras en la piel al contactar con una pared no lisa.

En cuanto a los materiales:

- Respecto a los balones y en tareas de golpear a los compañeros con ellos, no apuntar a los pies, sobre todo cuando el compañero se desplaza en carrera. Establecer consignas para avisar a los compañeros cuando un balón rueda sin control y se realiza una tarea en la que hay saltos o desplazamientos (voleibol, baloncesto, etc.) (Tercedor y cols., 2000).

- En cuanto a las picas, no utilizarlas como obstáculos a superar, ya que si son pisadas, ruedan con gran facilidad y pueden provocar caídas.

- En cuanto a las cuerdas, y concretamente en el juego del "soga-tira", cubrir las manos con tela o con la propia sudadera alrededor de la cuerda para evitar ampollas y quemaduras debido al rozamiento.

- En cuanto a las colchonetas, revisar el estado de la funda, que si acumula demasiado polvo puede repercutir negativamente en los alumnos asmáticos.

La seguridad en el uso de instalaciones y materiales debe estar presente en cada una de las sesiones de clase. Delgado y Tercedor (2002) proponen realizar una reflexión y evaluación de la seguridad de los espacios donde se realiza la clase de Educación Física.

Valoración de la seguridad de los espacios de actividad antes del inicio de una Unidad Didáctica (Delgado y Tercedor, 2002).

3) Evaluación del estado y uso adecuado de los materiales que se van a utilizar para desarrollar los contenidos.

Ejemplos:

3.1. Recepción en colchoneta tras salto extendido. Descripción de la tarea: Individualmente realizar una carrera previa de 10 metros, antesalto, impulsión en trampolín y recepción en colchoneta. Análisis del riesgo: obviando los riesgos inherentes a la propia actividad, si el coeficiente de rozamiento entre el material de la colchoneta y el tipo de suelo es bajo, la primera se deslizará hacia delante bruscamente cuando recepcione el alumno, cayendo éste al suelo, de modo que aumenta el riesgo de contusiones, fracturas, distensiones ligamentosas (en la muñeca si se recepciona en el suelo apoyando con la palma de la mano).

Papel del profesor en las decisiones preactivas: Puesto que cuando el alumno recepciona en la colchoneta, se transmite una fuerza horizontal a la misma, hay que cerciorarse de que el rozamiento colchoneta-suelo sea alto y no se posibilite el deslizamiento. En otro caso, hay que establecer los medios humanos y materiales para fijar la colchoneta y así no se deslice cuando se recepciona en ella.

3.2. Trepa por las espalderas. Descripción de la tarea: Pasar de un lado a otro de la espaldera, sin tocar el suelo, subiendo por una hilera de la espaldera y bajando por la siguiente, y así sucesivamente hasta el final. Análisis del riesgo: Barrotes degradados pueden tener astillas que provocarían heridas punzantes; un barrote, al recibir el peso de diferentes personas, puede partirse si está degradado, pudiendo provocar heridas y caídas; si los anclajes de la espaldera no son adecuados, ésta puede oscilar y el alumno puede caerse al suelo.

Papel del profesor en las decisiones preactivas: Revisar periódicamente el estado de los barrotes, sustituyendo aquellos que se encuentran degradados. Antes de realizar cualquier sesión donde se utilice la espaldera, realizar una revisión de los anclajes y los barrotes.

4) Análisis de las situaciones de riesgo (Autor: Pedro Ángel Latorre Román. PUBLICADO CON AUTORIZACIÓN DEL AUTOR) que se derivan de ciertas tareas debido a la organización, distribución espacial e idiosincrasia de la actividad.

Ejemplos:

4.1. "Pulso Gitano". Descripción de la tarea: En parejas, se cogen por la mano derecha y juntan la cara externa de sus pies derechos. El objetivo es lograr que el compañero separe su pie. Análisis del riesgo: Si se establece una distribución espacial donde las parejas están muy cerca unas de otras aumenta la probabilidad de patadas, pisotones, golpes, etc., entre ellos. Además, si alguna pareja realiza la actividad cerca de porterías, paredes, vallas o cualquier elemento rígido, en caso de caída o desequilibrio puede ocurrir un accidente muy grave.

 

Papel del profesor en las decisiones preactivas: Establecer los aspectos claves de organización y distribución en la información inicial de la tarea; considerar que la realización de esta tarea con una temperatura ambiental y humedad altas (por ejemplo, en las clases de última hora de mayo-junio) facilitará que las manos puedan soltarse con mayor facilidad por el sudor, aumentando el riesgo de caídas. Por esta razón, habrá que hacer la actividad indicando claramente el tipo de agarre a realizar. Esta actividad debería realizarse en los primeros momentos de la sesión, cuando el sudor no es abundante.

4.2. "Lanzamiento de balón medicinal". Descripción de la tarea: En parejas con un balón medicinal de 3 Kg. lanzar el mismo desde detrás de la cabeza. Análisis del riesgo: Un balón medicinal de 3 Kg. con la inercia que tiene tras ser lanzado, es un proyectil que pueden generar graves lesiones si impacta de lleno a un alumno. Por tanto, en todo momento hay que tener un control visual de todos los balones. Papel del profesor en las decisiones preactivas: Plantear una distribución espacial adecuada y los aspectos claves necesarios, de modo que todos los alumnos lancen simultáneamente, en la misma dirección y sentido. De esta forma, los alumnos tienen, en todo momento, los balones dentro de su campo visual. Además, nunca se recibirá un balón directamente, sino tras bote, para evitar posibles impactos fuertes si se escapa el balón de las manos.

4.3. "Pases de balón". Descripción de la tarea: En parejas, con un balón de rítmica, plástico o similar, desplazarse por el espacio pasándose el balón de diferentes formas. Análisis del riesgo: Un balón que cae al suelo al no recepcionarlo bien puede provocar una caída o torcedura de tobillo en aquellos otros que no ha percibido la existencia de un balón “perdido”. Papel del profesor en las decisiones preactivas: Plantear una distribución espacial adecuada y los aspectos claves necesarios, de modo que todos los alumnos lancen simultáneamente, en la misma dirección y sentido. De esta forma, los alumnos tienen, en todo momento, los balones dentro de su campo visual.

4.4. "Salta la cuerdecita". Descripción de la tarea: Individualmente, desplazarse por el espacio saltando a la cuerda. Análisis del riesgo: Si no existe un orden en cuanto a los desplazamientos (dirección y sentido) existe la posibilidad de golpear a otros compañeros con la cuerda. Papel del profesor en las decisiones preactivas: Plantear una distribución espacial adecuada y los aspectos claves necesarios, de modo que todos los alumnos se desplacen en una dirección y sentido pre-establecidos.

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