REVISTA ELECTRÓNICA DE ESTUDIOS FILOLÓGICOS


LA “RAPERA” NIHILISTA

 

¿Es el hip – hop algo propio de tíos violentos y chulos que gritan en inglés? Nona cree que sí, pero lucha porque el género sobreviva a las modas.

 

         Incluso en estos días en que se oyeron tambores de guerra, es innegable que la presencia de bases militares extranjeras tiene por lo menos una cosa buena: la radio. A falta de mejores canales, las ondas hertzianas de los yanquis en Torrejón o Rota han sido claves en la difusión del rock o el hip – hop en España. Muchos conocieron a IIMI Hendrix o Run DMC gracias a estas emisiones.

         Noemí Reina Sánchez, aka Nona – “porque de chica no sabía pronunciar mi nombre, decía Nona, y Nona se quedó” -, nació y vive en Jerez de la Frontera. Su madre es de Rota, tiene familia en Estados Unidos y sangre puertorriqueña. Nació hace 23 años y oye hip – hop desde que tiene uso de razón. “Pero siempre he escuchado todos los estilos de música. Mientras sea buena no me importa de dónde venga”.

         Empezó a rapear en 1998: “Rimando, rimando, yo había hecho alguna que otra letra, pero nunca pensé en llegar a nada serio. Luego entré en el grupo de mi antiguo novio, De Passe, del sello Zeroporsiento. Me llamaron para hacer un estribillo, me escucharon y me grabaron un maxi”. Y me hice a la idea en el momento. Saqué el maxi, después tuve movidas con la discográfica, y luego me peleé con los del grupo. Fueron unas malas experiencias. Acabé bastante quemada y me retiré”.

 

         Tentaciones. ¿Qué pasó?

         Nona. Movidas, quillo, discográficas y personales que me han tocao bastante, ¿sabes? Movidas incluso de llegar a las manos. Yo es que estoy muy quemada. He tenido muy malas experiencias. El rap es bonito, pero también violento. Los raperos son los más chulos y si te tienen que romper la cara, lo hacen. Da igual que seas una tía. Nunca pretendo ofender a nadie. Por lo menos a quien no me haya ofendido a mí antes. Si vas así por la vida acabas mal. Siempre. Seas tío o tía. Cosas del rap.

 

         “Cosas del rap”, dice. Sellos que cierran, artistas que no cobran, menciones a las madres, poses con cara de cabreo y, al final, amargas quejas sobre un hip – hop español que no despega. ¿Qué hace falta? “Más personas involucradas en el rap, que pinten, más gente que rime, más revistas dedicadas a este tema, más programas de radio… Que no sea una moda. Hay niños de 15 ó 16 años que hoy son raperos y mañana son pastilleros y escuchan vete tú a saber qué”.

         “A mí al principio no me gustaba el rap en español. Incluso lo criticaba. Y lo critico”, cuenta. “Lo primero que escuché en español que me sonó bien, bien fue 7 Notas. Lo escuché y pensé: “Este tío se lo curra tela”. ¿Lo último? “Lo del Payo Malo”. ¿Qué opina del panorama de las MC femeninas? “No me gusta ninguna. Lo primero que hizo Ari, lo de Tesis doctoral, estaba guapo. Pero después el álbum a mí no me gustó. ¿La Mala? Está bien. Suena bien. Pero no lo termino yo de ver mu rapero que digamos”.

         Un buen tema de rap tiene que tener… “Una base que esté guapa, que esté ahí tol rato, y una letra bien chula, con gracia, con arte”. Las de su primer disco las ha escrito ella, y están grabadas sobre bases de El Jefe de la M y SuperCoco, miembro de Agresión. El sonido busca reflejarse en el estilo americano. “En el rap francés, hay cosas guapas, pero el idioma… Y el alemán ya ni te cuento: parece que tienen una papa en la boca, con todos mis respetos. Me gusta el americano”.

 

         Nona, ¿qué quieres contar? “Nada. Yo escribo lo que se me pasa por la cabeza, las paranoias del día a día y ya está. No pretendo concienciar a nadie de na. Escribo lo que tengo dentro”. ¿Alguna aportación? “No, hago lo que me gusta, me lo paso bien, y si se escucha y vende, pues mira, mucho mejor”.

 

         T. ¿Algo más?

         N. Pues na, que voy a terminar de arreglar el piso. Que me voy a casar y a tener una vida tranquila y guay. Y a dibujar. También coso. Y soy manicura. Y esteticién.

Bruno Galindo.