Consideraciones finales

El aumento de la práctica regular de ejercicio físico es uno de los grandes objetivos en las políticas de salud, debido a sus efectos positivos sobre diversas variables relacionadas con la salud. Hoy día, la información de tales beneficios está al alcance de toda la población, a pesar de lo cual, el sedentarismo en las sociedades industrializadas se ha convertido en un problema de salud.

Sin lugar a dudas, existen variables que claramente condicionan el nivel de actividad física en cualquier población analizada. No obstante, otras variables muestran correlaciones con el nivel de práctica en una pequeña parte de estudios, mientras en otros se indica una correlación contraria o incluso la ausencia de tal correlación.

Ante la pregunta de qué variables condicionan la práctica de actividad física en niños, adolescentes, adultos y personas mayores, se puede contestar con una sola palabra: DEPENDE. Los diferentes estudios nacionales e internacionales dejan entrever una serie de variables que coinciden en la mayor parte de los estudios (influencia de la edad, del género, competencia percibida, etc.), pero hay otras variables que están muy condicionadas por el entorno micro-social y macro-social.

Sin embargo, existe un gran cuerpo de variables que pueden o no influir en la práctica de actividad física, y que tomen uno u otro camino va a depender de diversas variables como la educación escolar, familiar, influencia de los amigos o conocidos, la cultura reinante, las políticas en materia físico-deportiva, etc. El único modo de conocer, de una forma más objetiva, aquellas variables que van a condicionar la población es realizar un estudio concreto sobre dicha población. Si no es el caso, es conveniente buscar y analizar aquellos estudios realizados en entornos cercanos.

Este artículo está licenciado bajo Creative Commons Attribution 3.0 License